Los fabricantes confían en los datos y en su plataforma ERP para responder a preguntas críticas: ¿Cuáles son nuestros niveles de inventario? ¿Cuánto nos cuesta fabricar este producto? ¿Qué proveedores nos están entregando componentes con retraso?
Pero obtener una ventaja competitiva requiere algo más que responder a las preguntas obvias. Con la inteligencia empresarial (BI), las organizaciones pueden identificar preguntas que ni siquiera sabían que debían plantearse, junto con las respuestas a esas preguntas.
He aquí un ejemplo. Supongamos que quiere saber cuáles son los ingresos de un producto específico en la región del noroeste del Pacífico. Esa información es fácil de obtener, pero con BI, se puede profundizar en los números y cortar fácilmente las cifras de diferentes maneras. Así, al ver los ingresos, uno se pregunta también cuál es el margen y, con unos pocos clics, tiene la respuesta. Y curiosamente, los ingresos han aumentado en el último mes, pero el margen ha bajado. Es una pregunta que quizá no se hubiera planteado, y con BI puede responderla.
El poder de la inteligencia empresarial para los fabricantes
El BI se ha convertido en algo más que una función «nice-to-have». Después de todo, los datos son la base de la transformación digital y, según McKinsey, la pandemia ha hecho que las empresas aceleren sus planes de transformación digital entre tres y cuatro años. BI y analytics se han convertido en la corriente principal, como lo demuestra la transformación de Snowflake (una empresa de almacenamiento de datos) de una startup a una empresa de 63 mil millones de dólares en solo diez años. Pero Snowflake se ha diseñado pensando en las grandes empresas. Para el mercado medio, Snowflake es como comprar un Ferrari para llevar a los niños al colegio.
Los fabricantes del mercado medio necesitan una herramienta adaptada a sus necesidades. Por ejemplo, es habitual que una organización tenga datos clave almacenados en muchos silos desconectados. La herramienta de BI debe ser capaz de reunir fácilmente todos estos datos para su análisis. La incorporación de fuentes de datos externas adicionales puede hacer que el análisis sea aún más potente, ya que permite analizar una cuestión desde un punto de vista más holístico, señala Galdón Software.