Un sistema MOM no es sólo un sistema de gestión. A menudo, los miembros del equipo de producción son los que mejor entienden cómo funcionan los procesos. El sistema MOM también debe permitir delegar la toma de decisiones en el nivel más bajo de la planta, para que el equipo de producción tenga claro lo que tiene que hacer y cómo va con respecto a sus objetivos. Con esta información, pueden decidir qué opciones tomar para mejorar.
Por qué MOM necesita un ERP
En un mundo en el que la colaboración entre las distintas funciones empresariales es cada vez más importante, el funcionamiento de un sistema MOM de forma aislada ignora las aportaciones que las operaciones y la programación de la planta requieren para dar soporte a la empresa. Por eso, un sistema MOM debe ser parte integrante de un sistema ERP que utilicen los fabricantes, señala Galdón Software.
Sin el sistema ERP, la aplicación MOM no dispone de información sobre las fechas de entrega de materiales o componentes de los proveedores que deben tenerse en cuenta en la programación de la planta. En cuanto a la demanda, el sistema ERP gestiona el plan de necesidades de material, que aborda las cuestiones de qué se necesita, cuánto y cuándo. Esta información es fundamental para el plan maestro de producción que utiliza el MOM. Los trabajos de fabricación que gestiona un sistema MOM dependen de la lista de materiales que define qué elementos se necesitan en un producto y los pasos necesarios para fabricarlo. En consecuencia, una solución MOM debe considerarse como una extensión natural de un sistema ERP que utilice una empresa.
MOM y fabricación digital
Los sistemas MOM van a desempeñar un papel fundamental en la fabricación digital. Las organizaciones tendrán que invertir en capacidades MOM para seguir siendo competitivas en la nueva era de fabricación de la Industria 4.0. Mediante un sistema MOM, los fabricantes disponen de un seguimiento y una trazabilidad completos de un pedido para garantizar la calidad de un producto. Los fabricantes que cuenten con un sistema MOM podrán aprovechar las futuras ventajas del Internet Industrial de las Cosas (IIOT), mejorar la eficiencia y la visibilidad de las operaciones de la fábrica y tomar mejores decisiones basadas en datos detallados y en tiempo real.
Pero, ¿qué ocurre si la maquinaria de la planta de fabricación tiene más de 10 o 15 años y no dispone de los componentes incorporados para enviar datos a un MOM? La buena noticia es que la maquinaria aún puede conectarse, y tampoco supone un gran gasto.