El Porsche Cayman es la referencia en el campo de los deportivos con motor central y vuelve en su tercera generación con un nuevo nombre, 718. Un cambio de nomenclatura que señala una importante evolución mecánica: el abandono del seis cilindros planos de aspiración natural en favor de un cuatro cilindros planos sobrealimentado. ¿Es esto suficiente para derribarlo de su pedestal?
Empecemos sin más dilación con el tema que nos enfada: sí, el 718 Cayman tiene ahora un 4 cilindros turboalimentado en lugar del seis atmo y no, no es un sacrilegio, hay un montón de coches de 4 patas, planas o en línea, en la historia de Porsche, ya sea el 356, el 550, el 912, el 914, el 944 o el 968. O el homónimo 718 RSK, cuyo flat-4 de 1,5 litros, montado en el centro y de doble encendido, con 142 CV, ganó su categoría en las 24 horas de Le Mans de 1958 y en la Targa Florio de 1959. O más recientemente el 919 Hybrid, ganador en la Sarthe en 2015 y 2016, con un V4 turbo híbrido de 2,0 litros que desarrolla un total de 900 CV. Por último, si lo que buscas es una blasfemia, echa un vistazo a los SUV diésel que la marca de Stuttgart tiene en su catálogo, aunque se le vaya la mano produciendo deportivos.
Ponerle cara a esta generación del Cayman, cuyo nombre en clave es 982, sólo por su número de cilindros, es también asumir que un seis cilindros es necesariamente mejor en todos los ámbitos que un cuatro cilindros sobrealimentado. Y eso es malinterpretar la extraordinaria capacidad de Porsche para construir motores. Al igual que en el lanzamiento de los modelos anteriores, hay dos versiones disponibles: el 718 Cayman con un motor turboalimentado de 2,0 litros con 300 CV y 380 Nm y el 718 Cayman S, nuestro modelo de pruebas, con un motor turboalimentado de 2,5 litros con 350 CV y 420 Nm, ambos entierran a los seis planos de 2,7 y 3,4 litros en términos de potencia, par, rendimiento y consumo.
El cambio de uno a otro tampoco ha requerido una disposición especialmente amplia en el vano motor, ya que el 4 cilindros turbo ocupa el espacio que dejan los dos cilindros menores, con lo que también se mantiene el excelente reparto de pesos 46/54. Sin embargo, la entrada de aire adicional del motor sobrealimentado requirió una ampliación de las tomas de aire laterales.
Los motores del 718 y del 718 S son muy similares técnicamente, las diferencias entre ambos son el aumento del diámetro para obtener la mayor cilindrada y un turbo de geometría variable, señala Crestanevada Madrid. Por lo demás, comparten la lubricación por cárter seco, el ajuste del árbol de levas VarioCam Plus y la elevación de las válvulas, así como muchas cifras, como la relación de compresión (9,5:1), los regímenes de potencia y par máximos (4.500 rpm y 1.900 a 4.500 rpm respectivamente) y la velocidad máxima (7.500 rpm). Ambos están disponibles con una caja de cambios manual de seis velocidades o una PDK de doble embrague de siete velocidades, esta última ahorra un puñado de décimas en el 0-100 km/h y unas decenas de gramos de CO2 por kilómetro. También cabe destacar que el cambio de marchas con la palanca central se realiza ahora, por fin, de forma natural, tirando hacia arriba y empujando hacia abajo, si las levas situadas detrás del volante no sirven.
Desde la distancia, las diferencias estéticas pueden parecer leves, pero no se ha conservado ni un solo panel de la carrocería, con un frontal completamente revisado, desde las aletas hasta los faros y el paragolpes, puertas con tiradores ahora sin bivalvos con retrovisores montados en V y paneles de balancín rediseñados, tomas de aire ampliadas en los flancos y un nuevo paragolpes trasero rematado por luces traseras LED ahumadas separadas por una franja. El conjunto triunfa por su dinamismo y su pureza, con una discreción que dependerá del color y del modelo de llanta elegido, no siendo el llamado azul «Miami» de nuestro modelo de prueba para los tímidos.
En el interior, sin embargo, está lejos de ser revolucionario con cambios más sutiles, como el volante y las salidas de aire que adoptan el estilo del 918 Spyder mientras que el sistema multimedia PCM se ha actualizado con una pantalla multitáctil de 7 pulgadas, servicios conectados y Apple Car Play. El ajuste y los acabados son excelentes y hay mucho espacio para dos personas, cada una con su propio maletero, uno delante y otro detrás, para un halagador total de 425 litros, digno de un coche compacto.